La Asociación de Jóvenes Agricultores de la provincia, Asaja-Córdoba, ha aplaudido el nuevo sistema de vigilancia de la circulación y recepción de la aceituna establecido por la Subdelegación del Gobierno en Córdoba con el objetivo de evitar el robo de este fruto durante la actual campaña de recogida. En concreto, según recoge el anuncio publicado en el Boletín Oficial de la Provincia, los conductores y transportistas deberán portar una autorización expedida por el titular de la explotación de donde proceda la aceituna.
En este sentido, la Subdelegación del Gobierno en Córdoba dispondrá los oportunos servicios de vigilancia y control, tanto en los medios rurales como en los puesto de compra, almazaras y carreteras, para comprobar que los transportistas portan dicha autorización.
"Agradecemos el interés, esfuerzo y colaboración por parte del subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, en hacer posible esta reivindicación de la organización agraria que persigue acabar con los robos en el campo, fundamentalmente en la campaña de la aceituna, que ahora comienza", señaló el presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa.
En este sentido, el presidente del colectivo agrario destacó que medida pretende evitar "que por conductas desaprensivas, con ocasión del transporte, circulación o recepción de frutos agrícolas, se encubran situaciones de aprovechamiento ilícitas que pueden tener su origen en acciones delictivas de hurto o robo de estos productos".
De este modo, el documento apunta que, a la entrega de la aceituna en el puesto de compra o almazara receptora, "se exigirá la Autorización de Transporte del Oleicultor, que acredita la legítima procedencia del fruto que se recibe". De no portar dicho documento, y si se derivase algún indicio o presunción racional de procedencia ilícita del fruto, se dará cuenta a la Guardia Civil para facilitar su labor de prevención e investigación de hechos delictivos.
También, los puestos de compra de aceituna habrán de pertenecer, necesariamente, a un centro de compra vinculado a una almazara o a un operador en origen. Deberán estar inscritos en el registro, conservando los documentos que recojan las partidas de recepción y salida, en que hayan registrado su contabilidad de existencias.
Igualmente, el texto recoge que, con la finalidad de comprobar que el personal que interviene en la recolección de frutos se corresponde con el designado por el titular de la explotación, éste o el encargado de la misma deberá tener a disposición documentación que sea suficiente como medida de identificación y autorización, con la finalidad de impedir que se encubran situaciones de aprovechamiento ilegales, o de contratación irregular de trabajadores.
En este sentido, la Subdelegación del Gobierno en Córdoba dispondrá los oportunos servicios de vigilancia y control, tanto en los medios rurales como en los puesto de compra, almazaras y carreteras, para comprobar que los transportistas portan dicha autorización.
"Agradecemos el interés, esfuerzo y colaboración por parte del subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, en hacer posible esta reivindicación de la organización agraria que persigue acabar con los robos en el campo, fundamentalmente en la campaña de la aceituna, que ahora comienza", señaló el presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa.
En este sentido, el presidente del colectivo agrario destacó que medida pretende evitar "que por conductas desaprensivas, con ocasión del transporte, circulación o recepción de frutos agrícolas, se encubran situaciones de aprovechamiento ilícitas que pueden tener su origen en acciones delictivas de hurto o robo de estos productos".
De este modo, el documento apunta que, a la entrega de la aceituna en el puesto de compra o almazara receptora, "se exigirá la Autorización de Transporte del Oleicultor, que acredita la legítima procedencia del fruto que se recibe". De no portar dicho documento, y si se derivase algún indicio o presunción racional de procedencia ilícita del fruto, se dará cuenta a la Guardia Civil para facilitar su labor de prevención e investigación de hechos delictivos.
También, los puestos de compra de aceituna habrán de pertenecer, necesariamente, a un centro de compra vinculado a una almazara o a un operador en origen. Deberán estar inscritos en el registro, conservando los documentos que recojan las partidas de recepción y salida, en que hayan registrado su contabilidad de existencias.
Igualmente, el texto recoge que, con la finalidad de comprobar que el personal que interviene en la recolección de frutos se corresponde con el designado por el titular de la explotación, éste o el encargado de la misma deberá tener a disposición documentación que sea suficiente como medida de identificación y autorización, con la finalidad de impedir que se encubran situaciones de aprovechamiento ilegales, o de contratación irregular de trabajadores.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
