La Asociación de Nuestra Madre y Patrona Virgen de Guadalupe dio a conocer ayer los actos que se llevarán a cabo en 2017 para conmemorar el cuarto centenario de la traslación de Nuestra Señora de Guadalupe (1617-2017). Su presidenta, Josefa Ortiz, dio a conocer que el próximo año se cumplirán cuatro siglos desde que la pintura mural de la Patrona fuera trasladada a su capilla actual.
Ortiz aseguró que la intención de estos actos es que el amor de los baenenses hacia su Patrona siga creciendo: "la Virgen de Guadalupe debe ser el lazo de unión de todos los vecinos, de todas las asociaciones y colectivos, tanto religiosos como de otra índole". Para ello, todos los días 8 de cada mes se abrirá la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe para que los fieles puedan rendirle culto.
Entre las actividades ya programadas sobresalen la eucaristía del cardenal Fray Carlos Amigo Vallejo el 8 de enero, la presentación a la imagen de los niños bautizados el año anterior, la conferencia de Manuel Horcas el 11 de febrero, el encuentro nacional de parroquias y asociaciones de Nuestra Señora de Guadalupe en junio o la ponencia de Antonio Mesa el 8 de octubre.
Tras la presentación del logotipo conmemorativo, el párroco Jesús Joaquín Corredor recordó la veneración que ha tenido la capilla a lo largo de su historia y pidió unión en torno a la madre y patrona a todas las asociaciones, tanto eclesiásticas como civiles. La concejal Almudena Sevillano trasladó el apoyo del Ayuntamiento en la celebración de las actividades y destacó la importancia de compartir fuera de la iglesia la devoción por la Virgen de Guadalupe.
La traslación de Nuestra Señora de Guadalupe (1617-2017)
Los orígenes de la venerada imagen de la Virgen sentada con el Niño sobre sus rodillas se remontan al año 1490. La pintura mural estuvo situada durante mucho tiempo en un lugar de difícil acceso, ya que la ermita que le daba cobijo pasó a ser el lateral de un templo mayor, pero en 1617 un importante arquitecto que años antes había quedado paralítico prometió a Dios que si se curaba pondría todo su afán en recortar el trozo de muro. El milagro sucedió y el maestro de obras sanó. La pared fue tirada salvando la pintura de la Virgen de Guadalupe y pudo trasladarse sin daños al lugar que ocupa hoy.
Ortiz aseguró que la intención de estos actos es que el amor de los baenenses hacia su Patrona siga creciendo: "la Virgen de Guadalupe debe ser el lazo de unión de todos los vecinos, de todas las asociaciones y colectivos, tanto religiosos como de otra índole". Para ello, todos los días 8 de cada mes se abrirá la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe para que los fieles puedan rendirle culto.
Entre las actividades ya programadas sobresalen la eucaristía del cardenal Fray Carlos Amigo Vallejo el 8 de enero, la presentación a la imagen de los niños bautizados el año anterior, la conferencia de Manuel Horcas el 11 de febrero, el encuentro nacional de parroquias y asociaciones de Nuestra Señora de Guadalupe en junio o la ponencia de Antonio Mesa el 8 de octubre.
Tras la presentación del logotipo conmemorativo, el párroco Jesús Joaquín Corredor recordó la veneración que ha tenido la capilla a lo largo de su historia y pidió unión en torno a la madre y patrona a todas las asociaciones, tanto eclesiásticas como civiles. La concejal Almudena Sevillano trasladó el apoyo del Ayuntamiento en la celebración de las actividades y destacó la importancia de compartir fuera de la iglesia la devoción por la Virgen de Guadalupe.
La traslación de Nuestra Señora de Guadalupe (1617-2017)
Los orígenes de la venerada imagen de la Virgen sentada con el Niño sobre sus rodillas se remontan al año 1490. La pintura mural estuvo situada durante mucho tiempo en un lugar de difícil acceso, ya que la ermita que le daba cobijo pasó a ser el lateral de un templo mayor, pero en 1617 un importante arquitecto que años antes había quedado paralítico prometió a Dios que si se curaba pondría todo su afán en recortar el trozo de muro. El milagro sucedió y el maestro de obras sanó. La pared fue tirada salvando la pintura de la Virgen de Guadalupe y pudo trasladarse sin daños al lugar que ocupa hoy.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL