En el día de ayer se entregaron los prestigiosos Premios Nacionales Andrés Núñez de Prado, que desde hace 19 años organiza Ecovalia, en colaboración con la Familia Núñez de Prado, con el fin de reconocer públicamente la labor de quienes trabajan en temas relacionados con la Producción Ecológica.
En la modalidad de Investigación, el ganador fue Eduardo Aguilera Fernández, por su estudio titulado El potencial de la agricultura ecológica para mitigar el cambio climático en condiciones mediterráneas. Influencia de las prácticas de manejo. En la de Defensa, los premiados fueron El Rinconcito Orgánico Irazú (Costa Rica), el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria, Turqgesa (Osuna, Sevilla) y Biocrisara (Chirivel, Almería).
La entrega de los Premios Nacionales a la Investigación y Defensa en Producción Ecológica se celebró en la Almazara de la familia Núñez de Prado, con un público de más de 200 asistentes y la intervención de importantes personalidades de Costa Rica, Canarias y Andalucía, lugares de donde proceden los premiados de este año.
En las bases de esta décimo novena edición se especificaba que se valorarían especialmente las candidaturas relacionadas con el cambio climático. En la modalidad de Investigación, entre los múltiples trabajos de calidad presentados, el jurado escogió como ganador a un estudio que, según Álvaro Barrera Fernández, presidente de Ecovalia y autoridad que entregó el galardón, “reúne excelencia científica en su metodología y su análisis y sensibilidad ambiental en la elección del tema”. Su autor, Eduardo Aguilera Fernández, doctor de la Universidad Pablo de Olavide, recibió un diploma acreditativo, un emblemático olivo bañado en plata tradicionalmente asociado a este premio y la dotación económica de 6.000 euros.
Los resultados de este trabajo demuestran que las prácticas de agricultura ecológica contribuyen a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero e identifica los “puntos calientes” de emisión de una amplia gama de cultivos mediterráneos, observando que el manejo ecológico reduce las emisiones de GEI por hectárea y por producto en la mayoría de cultivos estudiados. Esta investigación se vertebra a través de cuatro estudios y el análisis de datos obtenidos en 80 fincas ecológicas y 80 convencionales.
Además, se concedió un accésit al estudio Calidad y perfil volátil de los aceites de oliva virgen extra variedad hojiblanca. Estudio comparativo del cultivo ecológico frente al cultivo convencional, presentado por un grupo de investigación de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Sevilla y el IFAPA de Cabra (Córdoba); y una mención especial al trabajo Tipificación de la calidad del huevo de gallina ecológico y convencional, de la investigadora valenciana Alba Rodríguez Mengod.
En la modalidad de Defensa de la Producción Ecológica, Ecovalia entregó el premio a cuatro entidades. Por una parte, el cónsul honorario de Costa Rica en Andalucía, Juan Domingo Corpás, recogió el galardón en nombre de Rinconcito Orgánico Irazú, finca educativa donde se promocionan los valores de la producción ecológica.
El Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria fue otro de los ganadores, por su proyecto de alimentación ecológica, local y de temporada en comedores escolares como motor de transformación de hábitos de producción, distribución y consumo.
La tercera en recoger el galardón en la modalidad de Defensa fue la alcaldesa de Osuna (Sevilla), Rosario Andújar, en nombre del ente público Turqgesa, por su proyecto de gestión ambiental sostenible y creación de empleo basado en la agricultura ecológica. Por último recibió este mismo galardón la almeriense Biocrisara, por su decidida apuesta por el desarrollo del sector ecológico en su territorio.
Tras la entrega de los premios se realizó el nombramiento de los socios de honor de Ecovalia, que este año han sido el bromatólogo Ángel Caracuel; la veterinaria María del Carmen García Moreno; Antonio Compagnoni, coordinador de la secretaría permanente de AgriBio Mediterráneo-IFOAM; Carrefour España; Carmen Casas, de la entidad de consumo ecológico Almocafre y José Esquinas, doctor ingeniero agrónomo. Después del acto, los asistentes pudieron disfrutar de una visita guiada a la almazara y un almuerzo ecológico.
En la modalidad de Investigación, el ganador fue Eduardo Aguilera Fernández, por su estudio titulado El potencial de la agricultura ecológica para mitigar el cambio climático en condiciones mediterráneas. Influencia de las prácticas de manejo. En la de Defensa, los premiados fueron El Rinconcito Orgánico Irazú (Costa Rica), el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria, Turqgesa (Osuna, Sevilla) y Biocrisara (Chirivel, Almería).
La entrega de los Premios Nacionales a la Investigación y Defensa en Producción Ecológica se celebró en la Almazara de la familia Núñez de Prado, con un público de más de 200 asistentes y la intervención de importantes personalidades de Costa Rica, Canarias y Andalucía, lugares de donde proceden los premiados de este año.
En las bases de esta décimo novena edición se especificaba que se valorarían especialmente las candidaturas relacionadas con el cambio climático. En la modalidad de Investigación, entre los múltiples trabajos de calidad presentados, el jurado escogió como ganador a un estudio que, según Álvaro Barrera Fernández, presidente de Ecovalia y autoridad que entregó el galardón, “reúne excelencia científica en su metodología y su análisis y sensibilidad ambiental en la elección del tema”. Su autor, Eduardo Aguilera Fernández, doctor de la Universidad Pablo de Olavide, recibió un diploma acreditativo, un emblemático olivo bañado en plata tradicionalmente asociado a este premio y la dotación económica de 6.000 euros.
Los resultados de este trabajo demuestran que las prácticas de agricultura ecológica contribuyen a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero e identifica los “puntos calientes” de emisión de una amplia gama de cultivos mediterráneos, observando que el manejo ecológico reduce las emisiones de GEI por hectárea y por producto en la mayoría de cultivos estudiados. Esta investigación se vertebra a través de cuatro estudios y el análisis de datos obtenidos en 80 fincas ecológicas y 80 convencionales.
Además, se concedió un accésit al estudio Calidad y perfil volátil de los aceites de oliva virgen extra variedad hojiblanca. Estudio comparativo del cultivo ecológico frente al cultivo convencional, presentado por un grupo de investigación de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Sevilla y el IFAPA de Cabra (Córdoba); y una mención especial al trabajo Tipificación de la calidad del huevo de gallina ecológico y convencional, de la investigadora valenciana Alba Rodríguez Mengod.
En la modalidad de Defensa de la Producción Ecológica, Ecovalia entregó el premio a cuatro entidades. Por una parte, el cónsul honorario de Costa Rica en Andalucía, Juan Domingo Corpás, recogió el galardón en nombre de Rinconcito Orgánico Irazú, finca educativa donde se promocionan los valores de la producción ecológica.
El Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria fue otro de los ganadores, por su proyecto de alimentación ecológica, local y de temporada en comedores escolares como motor de transformación de hábitos de producción, distribución y consumo.
La tercera en recoger el galardón en la modalidad de Defensa fue la alcaldesa de Osuna (Sevilla), Rosario Andújar, en nombre del ente público Turqgesa, por su proyecto de gestión ambiental sostenible y creación de empleo basado en la agricultura ecológica. Por último recibió este mismo galardón la almeriense Biocrisara, por su decidida apuesta por el desarrollo del sector ecológico en su territorio.
Tras la entrega de los premios se realizó el nombramiento de los socios de honor de Ecovalia, que este año han sido el bromatólogo Ángel Caracuel; la veterinaria María del Carmen García Moreno; Antonio Compagnoni, coordinador de la secretaría permanente de AgriBio Mediterráneo-IFOAM; Carrefour España; Carmen Casas, de la entidad de consumo ecológico Almocafre y José Esquinas, doctor ingeniero agrónomo. Después del acto, los asistentes pudieron disfrutar de una visita guiada a la almazara y un almuerzo ecológico.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL